El siguiente paso de mi «operación bikini» en el Urban Spa del Marisma Wellness Center de Santander es de lo más relajante: La Presoterapia.
Consiste en un traje hinchable que controlado desde un aparato electrónico va insuflando aire a distintas zonas del mismo y así aprieta suavemente y en ritmos distintos las piernas y la zona abdominal.
Resulta un masaje suave pero profundo por la progresión de la presión del aire dentro del traje. Y además como yo estaba encima de una verdadera cama de agua, sólo me faltó echar una siestecilla.
La presoterapia ayuda a reducir la hinchazón por acumulación de líquidos en estas partes del cuerpo. Es un refuerzo del sistema venoso y linfático. Por eso ayuda a reducir la celulitis, aunque también está indicada para problemas de circulación sanguínea como las varices.
Pero no sólo eso, ademas de aumentar la circulación sanguínea y el flujo linfático, la presoterapia mejora el aclaramiento del líquido extracelular, reduce la hinchazón, la inflamación y los edemas, alivia la fatiga de las piernas y mejora el flujo de oxígeno a través de todo el cuerpo. Todo ello resulta muy beneficioso para nuestra salud y nuestra imagen.
Es un verdadero drenaje linfático que luego redundará en la eliminación de toxinas mediante la orina.
La oxigenación de los tejidos internos que facilita este tratamiento, previene la temida flacidez.
Recibí un completo masaje de la cintura para abajo y por ambos lados sin moverme de mi confortable camita.
Y en una sala tan acogedora y relajante que ya estoy deseando volver a mi siguiente sesión.
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