Hoy le tocó el turno a la zona entre Pedreña, Ajo y Noja, saltando Somo, que es una playa preciosa. Es decir la costa oriental más próxima a Santander.
Salimos un día de «surada», como dicen aquí, o sea un viento sur muy fuerte y cálido que anticipa los días de lluvia.
En Pedreña soplaba de miedo:
Lo que se ve al fondo es Santander.
Como veis repito el uniforme otoñal de paseillo, vaqueros, polos, jersey de algodón y tenis azulitos.
Allí al fondo estoy con los perrucos en el Cabo de Ajo:
Y Mi Santorialist me regaló un bonito ramillete de azafrán silvestre:
A medida que avanzaba el día se calmaba el viento y subía la temperatura. En Noja ya me tuve que quitar el jersey:
Hay un parque con unos grafitis muy chulos:
Yo me quedo con el rosa, claro está:
La playa de Trengandín en Noja es famosa por sus rocas puntiagudas:
En este otro parque parece que tengo un decorado de película detrás de mí:
¡Que bonito es pasear sin nada en que pensar!
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