Hoy os voy a enseñar uno de mis DIY favoritos de este invierno, mi gorro de lana de Alpacas del Miera.
Ya os presenté esta interesante iniciativa cántabra que consiste en la cría y producción de lana de alpaca. Os lo conté con todo detalle en este post.
Pues bien, ahora podéis ver el resultado de lo que se puede hacer con dos ovillos de lana de alpaca natural, sin teñir. Pero no lo podéis tocar ni oler… Es una pena que os perdáis esas otras sensaciones y que no os las pueda transmitir a traves del blog (algún día hasta se podrá, todo se andará, je, je) porque no hay nada parecido en el amplio mundo de las lanas!!!
Es de una suavidad tal que cuando la tejía hasta la piel de mis dedos se volvía más suave…!!! Y tiene un olor finísimo a naturaleza, a campo al aire libre… no sé bien como describirlo. De veras que es una experiencia única.
Por no hablar de que no pica nada en absoluto, os lo dice una persona que no puede ponerse casi nada de lana por muy buena que sea, ni siquiera el mohair o el cashmire. Casi todas mis prendas de lana son de lana acrílica, la única que soporto directamente en contacto con la piel, los cuellos o gorros que tejo tienen que ser de lana acrílica… hasta ahora… todo me pica menos la alpaca. ¡¡¡Vaya descubrimiento!!!
Y lo calentito que es… Mira que estos días estamos pasado frío en Cantabria… pues este gorro me ha salvado la vida… porque ya lo han dicho hasta en el Telediario: el 40% del calor corporal se escapa por la cabeza…
¡Y este gorrito evita que todo ese calor se vaya y se quede conmigo!
Primer paso, montar puntos en aguja circular y tejer en punto elástico 2/2:
Segundo Paso: tejer en punto de ochos 4/4
Tercer paso: rematar los puntos pasando el hilo de lana por ellos y tirar para fruncir el extremo
Puede que le quede gracioso un pompón, en ello estoy…
Aquí tenéis el Facebook de Alpacas del Miera.
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