Estamos llegando al final del verano pero aún quedan días cálidos para lucir esos vestidos sueltos que tanto nos gustan para las tardes estivales.
Este vestido que llevo hoy de estilo étnico es de Punto y Aparte así como el bolsito bandolera de piel de potro. Ya lo he puesto muchas veces pero aún no os lo había enseñado por aquí.
Sus bordados y abalorios marcan ese estilo étnico sobre un vestido sencillo de corte baby-doll que bien podría ser ibicenco si en vez de esos adornos llevara puntillas.
Por eso no resulta demasiado recargado ni marcado de estilo y lo hace más atemporal como para poder ponerlo muchos veranos más.
En cuanto lo vi en la tienda me quedé enamorada de él y del bolsito, sabía que iban a ser mi look de este verano que ahora está acabando por el norte, aunque por el sur aún os queden muchos días de calor.
La pulsera que llevo le va muy bien para rematar ese estilo desenfadado y coquetón que tanto me gusta en esta época del año. Es de La Mar de Cristales como pudísteis ver en este post.
Y las sandalias planas me ayudan a rematar el look, mateniendo ese aire cómodo y fresco para un paseo por las Marismas de Astillero.
- Vestio y bolso: Punto y Aparte
- Pulsera: La Mar de Cristales
- Gafas de sol: Zara
- Sandalias: Therapie
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