Es la prenda que nos salva de fresquitos imprevistos y lluvias ocasionales, y que siempre hay que tener a mano en un armario del norte. Sobre todo este año, que parece que el invierno no se quiere ir para el otro hemisferio: ¡venga hombre que te están esperando con impaciencia!
Inventado en 1879 por el fundador de la casa Burberry como tejido capaz de resistir la lluvia, tuvo su protagonismo en ambas guerras mundiales y se popularizó como prenda exterior, aquí llamada gabardina, hasta que nos hemos acostumbrado a llamarlo en inglés.
Todas lo llevan:
Burberry le dedica una página especial.
Y los míos de primavera son éstos (el vintage rojo Burberry que tengo de los 90 os lo enseño en otoño):
Me costó 10 leuros en la Feria de Portugal
Este otro es de Riverside (comprado en la liquidación de una tienda):
En otra entrada, los outfits que me hago con ellos.