Es que en el norte nunca podemos prescindir del todo de ellas, bien porque refresca el tiempo, bien porque por la noche cae «la fresca» o «la rasca».
El caso es que deben estar a mano en nuestro armario, ya sean de punto o tipo sastre (también conocida como blazer)
Tengo alguna de hace más de 15 años, como ésta de cuero de Mango, comprada en la primera tienda que hubo en Galicia de esta marca (Santiago) y que cada año que pasa está más bonita:
Ésta es mi adquisición de este año, de piel sintética en azul (la visteis en el look motero):
Esta otra es una «milrayas» de Zara, ribeteada en azul, que sigue estando en plena forma:
Y esta otra es una evasé de H&M del año pasado: