Hace poco estuve cenando con unos amigos en este restaurante tan encantador de Suesa: Magnolia Bar.
Una decoración muy cuidada que ya se aprecia en la terraza de la entrada, en el interior con motivos casi de DIY, sencillo pero coqueto, nórdico y alternativo a lo que es un restaurante habitual.
Flores frescas en la mesa, lámparas con detalles muy alegres y coquetos, rincones de lectura y con juegos para niños…
Una maravilla para los sentidos y también en cuanto a restauración se refiere: los platos tradicionales de la cocina cántabra pero con un toque muy actual.
Y la amabilidad del trato y la sonrisa permanente que deben acompañar a locales como este y que no siempre sucede.
Os estoy mostrado unas fotos hechas con el móvil que espero os den una idea de lo bonito que es el restaurante y os anime a probarlo. En verano está abarrotado y creo que aún abren los fines de semana,. Pero estamos esperando con ilusión que sus propietarios abran otro restaurante similar en la calle Tetuán de Santander.
¡¡¡Enhorabuena y a seguir deleitándonos los sentidos con vuestro buen gusto!!!
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