Si hay una prenda que cumpla la mayoría de los requisitos exigibles, porque todos sería imposible, es «la perfecto».
Si aún no sabeis a que me refiero, os lo explico: es la cazadora motera negra de cuero de toda la vida pero adaptada a los nuevos tiempos, y que según los creadores de tendencias es la prenda supercombinable, indispensable en cualquier armario de una fashionista.
Y la mía me ha venido llovida del cielo, bueno mejor dicho de regalo de cumpleaños de una fabulosa amiga, Cristina. Es lo justo de motera, lo justo de corta, lo justo de ancha de hombros, y tiene una piel super-blandita:
Tiene la misma hechura que esta otra de tweed, y ya estoy componiendo los primeros looks con ella. Este primero para ya:
Y este segundo para dentro de poco cuando empiece a llegar el fresco del otoño:
Digamos que estas son dos combinaciones muy clásicas, pero con vestidos vaporosos lisos o de flores, o con pantalones no sólo pitillo, queda estupendamente. Voy preparando otros looks y os los iré enseñando en breve.
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