Empieza agosto y mi repaso particular por las colecciones crucero de la temporada.
La que más me gustó (y me las vi todas) fue la de Chanel. En su día ya comenté que algunos modelos eran «para la mesa de los niños» (darles de comer aparte) pero la mayoría me resultaron bonitos y bastante ponibles y algunos en concreto fascinantes. De estos últimos son de los que voy a comentar:
En fin, que si me fuera de crucero por el Mediterráneo Norte (Montecarlo y etc.) me bajaría a los puertos de mañana con los modelitos blancos del cinturón fajín, y de tarde con los conjuntos de pantalón rosa y camel. El vestido de encaje con chaqueta lo dejaría para la sesión de subasta de arte a bordo, y el de culotte y camisa para el paseo piscinero. Los otros dos vestidos largos, el negro y el precioso estampado en tonos pastel, los luciría en las fiestas nocturnas, dejando el negro para la cena con el Capitán.
¿Qué os parece mi selección?