Este proyecto fue hecho para un chico solo, sin intención de pareja, muy aficionado a la cocina. La máxima importancia del proyecto era una buena cocina, y conservar desde cualquier punto las vistas al mar. Se privatizó solo el inodoro y el resto se solucionó sin ninguna puerta visual. La vivienda, tenía más de 20 años y constaba de 70 metros cuadrados.
Omaira Marcos.
Este era el estado de la vivienda sin reformar:
Y así es como quedó:
Debajo de la isla va incorporada una mesa independiente, se desliza mediante ruedas y guardada es la barra de la isla.
En el pasillo de paso a la zona de noche, se colocó el vestidor, el lavabo y el urinario escondido camuflado con los armarios. La zona de ducha es independiente, con hidromasaje y amplia zona de secado y relax. El proyecto tiene 6 años. Como veis también arriesgo con el color. Espero que os guste.
Plano de distribucion.
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