Este año empieza muy especialmente para mí porque estreno ojos nuevos, si, si, una nueva visión. Me he operado la vista para quitarme las gafas y ha sido una experiencia tan gratificante para mí que os la voy a contar por si alguien está pensando en pasar por lo mismo.
Me operó el Dr. Andoni Arias en la Clínica Baviera de Bilbao las pasadas Navidades.
Fue un proceso muy sencillo, rápido y totalmente indoloro sin molestias postoperatorias.
Previamente me hice una consulta para ver las posibilidades de la intervención y ya entonces me hicieron el presupuesto económico. En mi caso se trataba de una intervención para corregir la visión de lejos y de cerca, es decir hipermetropía, astigmatismo y presbicia.
Para ello había que extraerme el cristalino y poner en su lugar una lente intraocular artificial. Suena muy grimoso pero sólo tardaron 10 minutos en hacerlo y no sentí nada más que ver una luz muy brillante y la voz de la enfermera que me tranquilizaba y me iba explicando lo que me estaban haciendo.
Luego me retiraron a una pequeña sala de recuperación y allí comprobé como ya iba recuperando la visión poco a poco.
Me operaron primero el ojo derecho y a la semana siguiente el ojo izquierdo. Y os puedo asegurar que ya podía leer el periódico sin gafas al día siguiente, cosa que no podía hacer desde hace muchos años.
Estoy encantada, sólo he de seguir unas pautas de colirios durante unas semanas, no frotarme los ojos y tener cuidado de no recibir ningún golpe.
Ya me avisaron de que al principio las luces artificiales me iban a resultar demasiado brillantes, o que por la noche las iba a ver rodeadas de círculos concéntricos, pero este efecto se va con el tiempo.
¡¡¡A partir de ahora ya sólo voy a usar gafas de sol!!! O cuando quiera remarcar un estilismo con unas bonitas gafas sin graduar…
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